Una vez acampados y saludado a los amingos, emprendemos el interminable y polvoriento camino hacia la zona de
conciertos. Intenté llegar a tiempo de La Pulquería y Las Pelotas, imposible, pero si fuimos instalándonos en puestos de privilegio para el concierto de Los Suaves a punto de empezar, ya oíamos los clásicos comentarios de sus seguidores más fieles, ¿En qué condiciones estará Yosi? “ya no está para este tipo de conciertos” mi opinión es que Los Suaves sin Yosi en el escenario no serian Los Suaves. Empieza el concierto apoteósico como siempre con solos de guitarra increíble y un sonido espectacular. Yosi nos sorprende (al menos a mí) con un nuevo loock, pelo y barba blanca muy larga. Suenan los primeros acordes de “Preparados para el Rock and Roll”, “Palabras para Julia”, “Malas noticias” y así hasta un final increíble y afortunadamente previsible con “Dolores se llamaba Lola” donde el público y Los Suaves eran una sola cosa.
Mago de Oz. Siempre he sido seguidor incondicional de Mago de Oz, he visto muchos directos suyos, pero para verles un concierto aceptablemente bueno hace falta seguirles hasta la saciedad. Esta vez empezaron, extrañamente muy tranquilos con Gaia un tema de diez minutos, les siguió Atrapasueños, Aquelarre, Molinos de Viento, etc. Hasta llegar al apoteosis final con su Fiesta Pagana que aunque pasen los años no pueden dejar de tocar. Desde hace mucho tiempo Patricia Tapia acompaña a la voz y los coros a José Andreas, la verdad es que le viene muy bien, lamentablemente ese “Cabroneeesss” ya no suena como antaño. Mencionar la batería blanca de Txus, llamativa y provocadora, muy chula. En resumen: me resultó emocionante volver a asistir a un concierto multitudinario de Mago de Oz.
Bad Manners: Confieso que no sabía mucho de ellos, quizá por eso me sorprendieron gratísimamente, Ska anglosajón puro y duro, pegadizo y bailable aunque a veces resultara algo repetitivo. Su líder y vocalista Buster Bloodvessel, todo un espectáculo en el escenario, sus músicos, buenísimos, increíbles, parecen sacados de una banda de pueblo de los años 60.
Trashtucada; Cuando los de Chiclana aparecieron sobre el escenario empiezó la juerga y el cachondeo, fiesteros con marcha asegurada, muy buenos. No los vi terminar mi cuerpo no daba para más. Había que darse el lago camino hacia el camping y descansar, mañana prometía ser intenso.
El Viernes después se cumplir con el “curre” por la mañana, nos trasladamos al camping, una corta pero gratificante siesta en la tienda, y ¡hala! que nos vamos a coger el tedioso camino polvoriento hacia el recinto de festivales dispuestos a ver en primer lugar a Benito Kamelas. Quini y los suyos disfrutan con lo que hacen y eso lo transmiten a sus seguidores, que dada la hora (19:00) y con un sol de justicia tenía mucho merito animar al personal. Mohinos Escocios. Más de lo mismo, muchos seguidores de este mítico grupo, El Sevilla, por cierto, con muchos kilos de menos, Puto, Chicho, Vidalito y Zippy lo tenían todo prácticamente hecho porque la lona que se puso delante de los escenarios para evitar el polvo estaba repleta de seguidores suyos. “Qué güeno que estoy”, “Niño, joé”, “Las niñas de la Saye”, “No vale pa ná” y terminaron con un pupurri, a algunos se les hizo corta la hora de concierto.
Nos tomamos un pequeño descanso y volvimos a la carga, No nos podíamos perder al gran Rosendo, sus conciertos son siempre lo mismo, serios, sin concesiones a la galería, fiel a su estilo, solo frente al micrófono, su guitarra y su rasgada voz son sus argumentos, que no son pocos, sus seguidores incondicionales saben que Rosendo nunca falla y que sus canciones son himnos, va caldeando el ambiente con temas como: “Masculino Singular”, “Flojos de Pantalón”, la temperatura sube con “Agradecido” y la apoteosis final con “Maneras de Vivir”.
O’FUNK’ILLO. Muy bien como siempre, Pepe Bao es una garantía de éxito, esté en el grupo esté, además en pleno concierto subió al escenario por “sorpresa” Raimundo Amador. ¡Que más se puede pedir!.
Los Delinqüentes. Solo había que trasladarse unos pasos para cambiar de escenario para ver a Canijo y compañía con todos su tropa garrapatera. Como dicen ellos “garrapatero es aquel que es natural, callejero, auténtico, y vacilón (sin pasarse con nadie). Esa es la gente garrapatera.» Pues en eso consiste sus directos, rumbas, rock, flamenco, reggae, todo esto lo mezclas, le pones 40.000 personas en el recinto y te sale una noche garrapatera de cojones.
Boikot: Momento álgido de la noche el recinto a tope y suena Inés con la voz de Rut. ¡Increíble! El público baila, se mueve, disfruta. Boikot es como los buenos vinos gana con el tiempo, ¡joder! Me ha salido esta frase hecha que no vale aquí, teniendo en cuenta que la bebida “oficial” es el Kalimocho. Las canciones más conocidas del grupo, “Hasta siempre”, “Bajo el suelo”, “Tierra quemada” o “Skalashnikov” fueron sonando una tras otra con el “Chiquitín” y su trompeta paseándose por el escenario como uno más del grupo . Tras presentar uno de sus temas recientemente llevados al terreno del videoclip, “Sin tiempo para respirar”, con la peña entregada llegaron los dos últimos temas: “Amaneció” y “Korsakov”. Fin del concierto.
Koma: A estas horas de la madrugada en el escenario principal aparece el grupo Koma, un sonido metalero excelente con Duque como protagonista. A pesar de no ser uno de mis grupos favoritos, me gustaron, eran las 5 de la madrugada, demasiado para mí. En este punto de la noche me viene a la memoria aquella famosa frase que ahora no recuerdo de quien es: “La juventud solo es un estado de ánimo”. Hasta mañana, aún nos queda el largo, polvoriento y tedioso paseo, sorteando la inmensa multitud, cual desfile de zombis vivientes se tratara.
Sábado. Eran muchas bandas las que nos quedaban por ver en el día de hoy. Vendetta, Txarrena, Celtas Cortos, Muchachito, The Locos, Sober, La Fuga, La Pegatina. Esta era mi programación personal anticipada, entre toda la oferta existente para el sábado. Pero como suele ocurrir el último día, casi sin querer y por inercia la solemos dedicar a los amigos, esos amigos que se preocupan de nosotros, que nos guardan el sitio en el camping, que nos echan una mano a montar la tienda, que nos hacen compartir esos momentos de relax, esas comidas tan amenas….Nombraría a todos pero hay que hacer una mención especial a Diego que siempre está pendiente de todo, a “Batman”, increíble Alberto, cuanta sabiduría encierras, una lección para todos, esa dura decisión personal. “Mr. Rusdhye”, Alex, gracias por esas largas charlas tan enriquecedoras. A Berme, Canario, Fran, Sabri, Fermín, etc. seguro que se me olvida alguien.
Al margen de sentimentalismos y a pesar de nuestra programación personal no fue posible asistir a todo debido a las conversaciones con los amigos, no pusimos atención a lo que oíamos, en esos momentos, Celtas Cortos, Txarrena, entre otros, pero sí nos preocupamos de coger “buen sitio” para asistir a lo que decían era lo mejor del festival.
THE OFFSPRING. La aglomeración allí presente aguantó estoicamente tener que compartir un espacio vital que fue haciéndose cada vez más peligrosamente reducido. Aún así supo agradecer que la formación liderada por Dexter Holland hiciera un repaso por sus mejores éxitos durante una actuación que fue más bien discreta y a la que le faltó potencia.
Arrancando con lo mejor de Americana, de Staring at the Sun a Why Don’t You Get a Job y sin olvidarse de Pretty Fly (for a White Guy), los californianos fueron dando vida a sus sencillos de siempre sin olvidarse de otros más recientes como Original Prankster, Hit That y You’re Gonna Go Far, Kid. En este concierto los sevicios sanitarios tuvieron que atenter varios ataques de ansiedad y mareos, nada importate.
Indudablemente podiamos haber hablado de otros conciertos celebrados en este festival. Básicamente nos hemos centrado en los escenarios 1 y 2, los principales, como sabeís en el escenario 3-carpa las bandas tributo, hip-hop y otro tipo de musicas también tenian su peña, pero además de que la narración resultaría interminable, nos hemos centrado en lo que vimos.
MQ