La Asociación Cultural «Docevientos» de Campo de Criptana ha alcanzado un nuevo hito con Priscilla.
El musical creado y dirigido por el músico y compositor Juan Gabriel Amores. Una producción que no solo ha cumplido las expectativas generadas en los últimos meses, sino que las ha superado con creces.
Basta asistir a una representación de PRISCILLA, Reina del desierto para comprender por qué casi todas las entradas para el Teatro Cervantes volaron en apenas dos horas. Tras casi tres horas de espectáculo vibrante, uno entiende que está ante un trabajo robusto, preciso, sin fisuras. Como ha señalado su director, Juan Gabriel Amores, “con mucha diferencia, es el mayor reto al que nos hemos enfrentado”, subrayando la enorme complejidad técnica y artística de un montaje que exige una coordinación absoluta. “Jugamos al segundo y al centímetro. Tiene que ser un motor perfectamente engrasado para que todo funcione”.
Y funcionó. Vaya si funcionó.
Casi tres horas sin un solo error, con un sonido impecable, una puesta en escena deslumbrante y un elenco entregado. Entre ellos, destaca de manera especial Juan Carlos Peinado, que firma una Bernadette memorable, a la altura del inolvidable Terence Stamp en la película original. Su interpretación es, sencillamente, impresionante.
Pero sería injusto no mencionar al resto del reparto: José María Alberca, Manu Iniesta y todos y cada uno de los actores que pisan el escenario. Todos brillan con luz propia. Y qué decir de las tres divas —Valle, Fátima y Sandra—: voces poderosas, afinación impecable y una presencia que eleva cada número musical. Enhorabuena a las tres.
Lo más curioso —y quizá lo más admirable— es que gran parte de la magia no se ve directamente en escena: las voces en la sombra, los coros, los músicos, el equipo técnico, la escenografía, el maquillaje, la peluquería, el vestuario… Un ejército artístico y humano que sostiene un espectáculo de gran formato, arriesgado, vibrante y lleno de vida.
Priscilla, Reina del desierto celebra la diversidad, la libertad y la superación personal. Y lo hace con una energía que ha conectado de lleno con el público desde la noche del estreno.
El musical permanecerá en el Teatro Cervantes de Campo de Criptana hasta el próximo día 30, con todas las entradas agotadas. Un éxito rotundo para Docevientos y para la cultura.
