Barón Rojo y Obús dos bandas que hay que mencionar para entender las claves del rock en nuestro país y más concretamente el heavy metal, están de cumpleaños, ambas celebran su 30 aniversario. Barón Rojo (con su formación original, Carlos y Armando De Castro, José Luis Campuzano “Sherpa” y Hermes Calabria). lo celebra el día 22 de Octubre en el Palacio Vistalegre y Obús con “Fortu” Sánchez y los fundadores del grupo Juan Luis Serrano y Francisco Laguna más Fernando Sánchez, en la Sala la Riviera (Madrid). (para los que no puedan ir a Madrid el sábado 19 de noviembre estarán en la Sala Arco de Alcazar de San Juan) Estas dos bandas marcaron la tendencia del heavy metal revolucionando el país con sus potentes directos, “greñas” y prendas de cuero con chinchetas eran las señas de identidad, Obús junto a Barón Rojo llegaron a ocupar puestos de privilegio en las listas de éxitos de la época, algo impensable en los tiempos actuales en este tipo de grupos.
Debería servir de lección a quienes no entienden esta forma de cultura, esta forma de hacer música. Está claro que cuando un determinado colectivo cumple 30 años merece el respeto por parte de todos. En este caso, Obús y Barón Rojo cuentan con el apoyo mediático y la cobertura necesaria para dar brillantez a esta onomástica, no obstante sería bueno refrescar la memoria: Asfalto, Ñu, Bloque, Coz, Leño, Tequila, Los Suaves, Barricada, incluso un tal Almodovar y McNamara, fueron culpables de esa explosión musical que hizo olvidarnos temporalmente de esos discos de importación a los que se recurría a menudo.
No nos podemos olvidar de de esas otras autenticas joyas como los que compusieron Antonio Flores, “No Dudaría”; Radio Futura, “Enamorado de la moda juvenil”; “La chica de ayer” de Nacha Pop, hoy cualquier referencia a la movida no tiene sentido si no se menciona alguno de estos temas. En el año 81 sigue Antonio Flores, esta vez con “Pongamos que hablo de Madrid” en las listas de éxitos del ese año arrasaba el rock and roll: Loquillo, Tequila con “Salta”, Leño con la mítica “Maneras de vivir”, Barón Rojo con “Larga vida al rock and roll”, Obús con “Va a estallar el obús”.
Haciendo un paréntesis en la historia de aquí. Fuera sucedió un hecho histórico y lamentable para los amantes de la música, Johon Lennon era asesinado por uno de sus fans. Al año siguiente el gran Bob Marley con 36 años también nos dejaba, aunque en circunstancias totalmente distintas. Por aquél entonces arrasaban en EE.UU The Police, The Rolling Stones, Blondie, Phill Collins, Vangelis y el gran John Lennon, auténticos monstruos de la música. En España corrían tiempos difíciles, había otra movida paralela: la politica estaba revuelta, la eclosión de una nueva cultura, la libertad de expresión se debatía constantemente, el 23F, la expropiación de Rumasa, La bola de cristal, Verano Azul, Mazinger-Z, etc.
No sería serio ni justo, si se habla de música rock, olvidarse de Vicente “Mariskal” Romero creador en gran parte de aquella ola rockera española que nos inyectó el rock en vena, un pionero en casi todo, aquellos tiempos en que la música rock o el heavy metal y sus seguidores la integraban «pandas de melenudos, drogadictos y maleantes» existía el Mariskal Romero defensor y en cierto modo artífice de este movimiento y, en mi opinión, autentico impulsor de la famosa “movida”, creador de el sello discográfico Chapa, con aquél famoso grito de guerra “viva el rollo” que les abrió las puertas a numerosas bandas para las cuales grabar un disco era todo un sueño, una utopía . Estos días he escuchado una entrevista que le hacía Vicente Romero al grupo Dulce Neus. Es curioso, soy admirador incondicional además de amigo del grupo, cuando ellos (Nieves, José, Ricardo y Román) seguramente no habían nacido, yo y muchos de mi generación ya queríamos ser disc-jockey (pinchadiscos) o sowman como el Mariskal Romero. Por motivos personales que no vienen al caso, no oía a Vicente Romero desde hace mucho tiempo, para satisfacción personal observo que no ha cambiado nada, la independencia periodística e informativa de la que hacía gala entonces la sigue manteniendo intacta, llamando a las cosas por su nombre y poniendo a cada cual en su sitio sin miedo a represalias del “jefe” o “director” de turno, así era y por lo que he oído así sigue siendo hoy, el mismo Mariskal Romero de siempre que ya es difícil en estos tiempos mantenerse independiente, aparte de ser una enciclopedia musical andante. Cuanto le debe el mundo del rock a este personaje. Además hoy he reforzado más si cabe mi admiración por él al oírle relatar que la idea de su compañía de discos Chapa, se gestó en un lugar mítico para mí: el Cerro de la Paz, en “Las Musas” del gran Paco Balbuena en Campo de Criptana en aquél concierto fallido de Asfalto (el que esto escribe era habitual de “Las Musas” en aquella época y no andaba muy lejos de aquella fatídica tormenta).
Como reflexión final personal tengo que decir que afortunadamente para muchos hoy la mayoría de los macro-festivales que se organizan en nuestro país utilizan como reclamo y atracción principal (pese a quién le pese) a los mismos que este año celebran el 30 aniversario de su aparición en los escenarios y que no hay quien haga bajarse de ellos. Desafortunadamente para otros, las nuevas, buenas y grandes bandas que últimamente recorren el circuito musical del país no logran “retirar” definitivamente a las vacas sagradas del escenario.
Y es que una vez más los viejos rockeros nunca mueren.
Para mí la única diferencia que encuentro en estos 30 años, es que antes se pagaba 300 pts más o menos por un concierto de Obús y ahora oscila en los 20 o 30 pavos.
Viva el rollo
Viva el Rock and Roll
MQ
La verdad que hoy en día hay una gran carencia de grupos rock de nueva generación. Y no solo eso, sino que es más difícil encontrarlos porque son muy poco publicitados, las compañías se centran en otro tipo de música y hacia un público mas «oveja» si se me permite la expresión, por lo que solemos recurrir a lo que era conocido antes y se sigue conociendo ahora. Y estoy seguro que hay por ahí escondidos auténticos grupazos…
No hay carencia de grupos de rock, hay muchos y muy buenos lo que ocurre es que no se sabe bien porqué, para llenar un recinto medianamente grande necesitan de estos otros.